una pinza suelta



Ahí me quede parada, solo un instante para recordar el alma,
que desde hacía días no me hacia compañía. Había estado sin alma?? No me acordaba, no sé ni cómo llegue a ese punto, todo estaba borroso y sin principio… como me llamaba??
Todo, en este mundo perfecto, dibujaremos arboles de papel reciclado, los peces en el mar estarán enlatados, y el asfalto seguirá bajo nuestros pies, invadiendo cada vez más los rincones del mundo. ¡¡¡Quien para esto¡¡¡
Yo me bajo en la siguiente parada, no, no puedo seguir ese ritmo, ya no me acordaba de lo que es estar quieta, sin hacer nada…

1 comentario:

Anónimo dijo...

no te pares en la siguiente , espera un poco más porque algunas personas se sienten muy bien llevándote como compañera de viaje .
Muy bella entrada.
gracias por colocarme en tu puente