y ahora te recuerdo,
tu mirada recorrió mi cuerpo, sabiendo que no duraría,
sabiendo que en apenas unas horas desaparecerías
y como un príncipe de cuento
inmortal y perfecto te conservas,
tu recuerdo me envolvía
tu recuerdo...
tu recuerdo...
no hubo ni encuentro, ni despedida,
solo imaginación desbordada y desmedida,
amor platónico y flechazo
que se disolvieron en la noche,
camuflándose en los pájaros de mi cabeza,
para que siempre dude, si fue realidad,
si no fue un reflejo de memoria,
que hefímero y placentero, me engaña el alma
y hace que te busque en la cola del super,
en las olas que vienen,
en las olas que vienen,
en la gente del autobús,
2 comentarios:
Quizás cualquier día lo encuentres.
Besos.
espero que no... jajajajaja así esta la mar de bien, siempre perfecto¡¡
besicos
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